En enero de 2019 una familia tipo (dos adultos y dos hijos menores) necesitó $26.442,92 para no ser pobre y $10.577,16 para no caer en la indigencia. Así lo informó el Indec, de acuerdo con los valores del mes último de la Canasta Básica Total (CBT), que incluye alimentos y servicios para no ser considerado pobre, y de la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que define la indigencia.

Según el organismo, en ambas canastas hubo un aumento del 3,7% con respecto a diciembre de 2018 y una suba interanual del 55,8%, mostrando una preocupante aceleración. En el último informe del organismo, la misma familia tipo había necesitado en diciembre $25.493,80 para evitar la pobreza y $10.197,53 para eludir la indigencia.

Estas variaciones no tienen su correlato con los ingresos, por lo que no debería sorprendernos que la pobreza y la indigencia se incrementen.

Si tomamos los ingresos básicos, vemos aumentos que van casi 20 puntos por debajo de las canastas básicas, como la Asignación Universal por Hijo que, a enero, creció interanualmente al 27,5%; la jubilación mínima, al 28,5%, y el salario mínimo vital y móvil, al 27,5%.

Cifras también alarmantes para Ciudad de Buenos Aires

La Dirección General de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires (DGEyC), por su parte, estimó que una familia tipo porteña debió ingresar en enero $25.794 para no caer en la pobreza. Ello representa un incremento interanual del 50,9%. En la comparación con diciembre último, el aumento de la CBT fue del 3,5%: pasó de $24.865,43 a $25.794.

Mientras que para situarse sobre la línea de indigencia, el grupo familiar debió contar con $12.721,73 durante enero de 2019. Esto supone un alza interanual del 52,8% y una suba del 3,9% comparado con diciembre de 2018.