En diciembre de 2018, el estimador mensual de la actividad económica del Indec (EMAE) indicó que esta cayó 7% con respecto a igual mes de 2017, operando a niveles similares a los de 2010.

Por su parte, el indicador desestacionalizado de la actividad económica creció 0,7% frente a noviembre de 2018. Esta suba mensual, incluso cuando todavía puede ser corregida a la baja -como ocurrió en octubre-, es mejor de la esperada. Pero el +0,7% sucede a la caída de 2% de noviembre 2018, que llevó a la actividad económica al mínimo nivel en casi 8 años.

Ganadores y perdedores

A nivel sectorial, salvo el agro, educación y salud, todos los sectores registraron bajas en diciembre de 2018 en términos interanuales (i.a.). Los más dañados fueron:

  • Comercio mayorista, minorista y reparaciones (-16% i.a.).
  • Industria manufacturera (-14% i.a.).
  • Construcción (-12,7%).

Entre los 3 restaron 5,7 puntos porcentuales de crecimiento interanual (83% del total). El dato debe alertar, considerando que estos 3 sectores absorben el 45% del empleo.

Mientras tanto, el agro, que creció 5% i.a., contribuyó con 0,3 puntos porcentuales (en forma directa) al crecimiento anual del PBI de diciembre 2018. Sería de todos modos deseable contar con series sectoriales desestacionalizadas, para entender el impacto puntual de cada sector en la dinámica del mes: la serie con estacionalidad solo permite un análisis interanual.

Cómo cerró 2018

El acumulado de 2018, respecto al de 2017, cerró con una caída de la actividad económica promedio del 2,6% anual. Pero hay que esperar a los datos de las cuentas nacionales, que podrían modificar este valor.

Se confirma que 2018 fue un año más de “crecimiento serrucho”. El saldo, desde 2011, arroja una caída del 0,1%.