Empecemos repasando lo que sucedió en el año en términos de inversiones no sofisticadas.

Parecía venir un 2018 con apreciación real y tasas reales. ¿Qué quiere decir eso? que la inflación le iba a ganar a la variación del tipo de cambio y que la tasa de interés iba a ser mayor a la inflación.

Pero el freno a la entrada de capitales produjo un reacomodamiento fuerte del dólar y todos los planes cambiaron. ¿Cómo vamos en el año? En la imagen pueden ver el ranking de inversiones.

¿Hacia delante que puede suceder? como vimos este año, la economía es impredecible. Actualmente entre las mejores elecciones están las Lecaps, Letras capitalizables del tesoro que están pagando alrededor del 50% anualizado y tienen liquidez en el mercado secundario.

El plazo fijo tradicional está ganando atractivo gracias a la necesidad de los bancos de tener fondeo, ya sea para prestarlo o para obtener el rendimiento de las leliqs. Entre 50% y 55% anual se puede obtener con este tradicional instrumento.

Los bonos que ajustan por inflación o los plazos fijos ajustables son una buena opción para tener cobertura contra una aceleración de los precios.

¿El dólar perdió atractivo? No tanto, en el corto plazo la tendencia es a la apreciación, sin embargo, la incertidumbre de un año electoral siempre le pone presión al precio del billete. En tal caso, bonos en dólares es una buena alternativa.

Si no sabés cómo funcionan estos instrumentos, una buena forma de ingresar es a través de fondos comunes de inversión, ganás liquidez y tiempo. Hay muchos bancos y sociedades de bolsa que ofrecen estos instrumentos.